Hay momentos que encierran cierta magia en nuestras vidas y yo tengo la suerte de estar viviendo unos cuantos últimamente y más suerte aún de ser consciente de mi buena estrella y disfrutar totalmente de los momentos presentes, sin pesos del pasado ni invenciones futuras que no me llevan a ninguna parte.
Ayer, domingo, tuvo magia; la magia de un grupo de mujeres que compartieron unas cuantas horas al calor de una riquísima comida y de una estupenda compañía. Nos juntamos siete mujeres muy diferentes, las había altas, bajas, alargadas, redonditas, nerviosas, pachorras, saludables, bronquíticas, cocineras, comedoras, graciosas, risonas, lesbis y heteros…qué más se puede pedir.
Fluyó el día entre risas, miradas cómplices, bromas y cariño; tan agradable todo y tan pleno que las horas volaron sin darnos cuenta.
Cuando se fue yendo la gente, me di cuenta de que, en aquella casa, seguía, de alguna manera, brillando la magia de las mujeres y de que yo era una privilegiada por vivir un día así.
Estoy segura de que domingos como éste se repetirán y volveremos a compartir comida, vino, café, sofá y buen rollo. Gracias, chicas.
15 comentarios:
Tengo que te lo decir: mucho me presta (sa)verte así.
winnie¡¡¡ pelota¡¡¡
jajjajajjajjaaja
Me encanta verte( leerte) así y entiendo que te gustara esa comida, yo tuve una parecida y es genial. un besazo
mamibollo, creo que se fue la pinza, ajjajaaaa ¿ónde viste tú a winnie ahora?????
Mármara y Ripley, coincidís en que os alegra verme así y sé que es verdad porque he pasado una temporada algo chunga (por no decir muy jodida). Pero ahora voy colocando el dolor que sigue ahí, pero va dejando sitio a la risa, al disfrute y al cariño, más no puedo pedir, ni quiero pedirlo.
me se fue la pinza, esfestivasmente....sientolo mucho fies, pero la edad no perdona¡
Estamo en sintonía Marcela. En ese punto vital en el que llenar tu casa de amigos es tan gratificante como fue llenar los bares con los amigos.
Besos cósmicos
Saber disfrutar de las amigas es una suerte que hay que valorar a cada minuto, y saber disfrutar de esos momentos con ellas es inigualable. Te lo digo por experiencia, porque ellas también son mis amigas y algo más, són mi familia elegida. He tenido mucha suerte.
Na mamibollo...la edad que no perdona jajajajajaj
Aqui la nerviosa en antena!! Bueno...en red!!Bueno... en lo que sea!!. La verdad es que lo pasamos genial, la comida buenisissima, la tarta..ñam ñam, el limonchelo esi,
uffff el limonchelo... me abruma!! Y la compañia mejor que mejor, con heteros incluidas!!(anda..acerolate un poco).Bueno que me lo pase pipa!!. Un beso enorme
La mierda la guaja!!
para cuando un encuentro mágico de esos interprovincial, internacional, interestelar o internaútico?? Vamos que me dan una envidiaaaaaaaa!
Que siga la magia Marcela, la alegría, las risas y las celebraciones. Besos!!!!
Morgana, estás invitada cuando quieras darte un saltito por aquí. Celebraremos un encuentro de esos en tu honor.
Sardinina, tienes suerte de tener gente como ésta, porque el cariño es grande y se nota en grupo.
winnie, tienes a mamibollo un poco fuera de bolos, ajjajajaa, pero tan íntegra como siempre.
La mierda la guaja, eres genial, es un gustazo conocerte y compartir contigo los momentos, las marítimas no seríamos nada sin ti.
lizzy, veo que estamos en sintonía; las mujeres tenemos una especial sensibilidad para apreciar todo el movimiento de empatía que hay en toda reunión de este tipo. Qué placer.
qué bonito cuando se comparte...
Magia también ha sido encontrarnos con tu blog. Gracias por el optimismo y positividad, por la alegría y la belleza que se respira paseando por tus noticias y comentarios.
Te colocamos en nuestro blog.
Somos un grupo de coeducación que hemos abierto un blog, http://zubiakeraikitzen.blogspot.com/, para compartir nuestros intereses y deseos con quien lo desee.
Zorionak Marcela!!! Un abrazo grande
Que agradable son siempre las reuniones con gente que tiene la misma inquietudes que tú y ganas de compartirlas. Son el antídoto perfecto para este mundo que se esta volviendo tan impersonal y que nos hace encerrarnos en nosotros mismos para no sucumbir ante él.
Besos desde el agua.
Jo, qué envidia... cómo me gustaría a mí también poder rodearme de mujeres...
Disfruta.
Besos
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